Cuando el tratamiento tópico no controla la dermatitis atópica en adultos, una serie de tratamientos avanzados pueden mejorar los resultados y hay que tenerlos en cuenta, según la nueva guía basada en evidencia de la American Academy of Dermatology (AAD).[1]La guía contempla los usos aprobados y no aprobados de la farmacoterapia sistémica y la fototerapia, incluidos los nuevos fármacos que han sido desarrollados desde que se publicó la última guía hace casi una década. Entre estos se encuentran los fármacos biológicos y los inhibidores orales de cinasas Janus (JAK), así como los inmunomoduladores y antimetabolitos orales o inyectables más antiguos, los antibióticos orales, los antihistamínicos y los inhibidores de la fosfodiesterasa 4. La guía califica de "sólida" la evidencia existente para dupilumab, tralokinumab, abrocitinib, baricitinib y upadacitinib. También recomienda de forma condicional la fototerapia, así como ciclosporina, metotrexato, azatioprina y micofenolato pero desaconseja el uso de corticoesteroides sistémicos.
Esta nueva guía actualiza las recomendaciones de 2014 de la American Academy of Dermatology para el tratamiento de la dermatitis atópica en adultos mediante fototerapia y farmacoterapia sistémica.[1] "En ese momento, prednisona ─universalmente acordada como el tratamiento crónico menos apropiado para la dermatitis atópica─ era el único agente aprobado por la Administración de Alimentos y Fármacos (FDA) de los Estados Unidos", describió el Dr. Robert Sidbury, maestro en salud pública, quien copresidió un grupo de trabajo multidisciplinario de 14 miembros que formuló la guía. "Este fue el motivo para la actualización".
La última guía fue publicada en versión electrónica en Journal of the American Academy of Dermatology.[2]