INTRODUCCIÓN
La dermatitis atópica (DA) es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel caracterizada por picor intenso, piel seca y lesiones eccematosas recurrentes. La alergia alimentaria se desencadena por la exposición a un antígeno alimentario y puede manifestarse como urticaria, angioedema, síntomas gastrointestinales, problemas respiratorios y anafilaxia. En pacientes con DA recurrente, el eccema puede empeorar en horas o días después de la exposición a los alimentos, mientras que la exposición reducida o la exclusión completa de los alérgenos alimentarios en la infancia puede mejorar o prevenir por completo la DA.
De manera tradicional, se suponía que la sensibilización primaria a los alérgenos alimentarios se producía de forma principal como resultado de la exposición a los alérgenos en el intestino, pero ahora se reconoce que la sensibilización alimentaria puede desarrollarse después de la exposición primaria a los alérgenos en la piel.