lunes, 4 de agosto de 2014

Un estudio europeo liderado por Germans Trias valida una escala que predice riesgo de complicaciones respiratorias postoperatorias


Este tipo de complicaciones son las más frecuentes y la principal causa de muerte después de una intervención quirúrgica; la escala consta de siete ítems sencillos de calcular que permiten clasificar al paciente según tres grupos de riesgo





Profesionales del Servicio de Anestesiología y Reanimación del Hospital Universitario Germans Trias i Pujol  han validado, en un estudio con 63 centros de 21 países europeos, una escala que predice el riesgo de que los pacientes intervenidos quirúrgicamente padezcan complicaciones respiratorias. Casi un ocho por ciento de las personas operadas en Europa sufre este tipo de complicaciones, que sobre todo se concretan en insuficiencia respiratoria o infección pulmonar, y que son la principal causa de muerte postoperatoria. Conocer su riesgo es necesario para actuar con antelación y reducir su incidencia.



Germans Trias creó y validó la escala en Cataluña (bajo el nombre de proyecto ARISCAT) en 2010, y este año ha ratificado su validez a nivel europeo (proyecto PERISCOPE). Así lo publicará la revista Anesthesiology de agosto, que ya se puede consultar 'on line' y que además le dedica la editorial, ya que el estudio es el primero que valida internacionalmente una escala de estas características.


La escala, que los anestesiólogos pueden aplicar de forma sencilla en la consulta preanestésica con los pacientes, consiste en medir siete ítems: la edad, la presencia de anemia en los análisis recientes, el tipo de intervención, su duración, la urgencia del procedimiento, las infecciones respiratorias previas y la saturación arterial de oxígeno.


Este último es el único ítem que requiere una pequeña prueba en la misma consulta, colocando un aparato en el dedo. Más de 5.000 pacientes europeos aceptaron ser incluidos en el estudio, que ha confirmado que la escala funciona, una vez registrado si sufrieron o no complicaciones respiratorias postoperatorias y cómo evolucionaron.


El proyecto PERISCOPE, que clasifica a los pacientes en tres grupos en función del riesgo de complicaciones, ha ratificado que este riesgo depende en un 50 por ciento del estado de salud del paciente antes de la operación; el otro 50 por ciento hace referencia a las características de la intervención quirúrgica. También, ha detectado diferencias entre el riesgo de complicaciones respiratorias postoperatorias en función del área de Europa a la que se pertenezca, pero hace falta estudiar más esta cuestión para determinar sus causas.


El siguiente paso es concretar, en base a la experiencia, cuáles son las medidas más adecuadas a adoptar antes, durante y después de la intervención quirúrgica para minimizar el riesgo que PERISCOPE ayuda a afinar. El estudio ha sido financiado gracias a la Sociedad Europea de Anestesiología, mientras que el trabajo que lo precede, ARISCAT, se pudo llevar a cabo gracias a la Marató de TV3.


Fuente: http://www.elmedicointeractivo.com/



viernes, 1 de agosto de 2014

Logran reconstituir un epitelio respiratorio nasal a partir de células madre maduras de su mucosa

Investigadores del Instituto de Investigaciones Biomédicas August Pi i Sunyer de Barcelona, dirigidos por Joaquim Mullol, han realizado un trabajo, publicado en la revista 'PLoSOne' y recogido por la plataforma Sinc, en el que reconstituyen un epitelio respiratorio nasal nuevo a partir de células madre maduras de su mucosa, tanto de tejido sano como inflamado. Lo han conseguido mediante una técnica de exposición del cultivo de células primarias al aire.


Y es que, el epitelio nasal constituye una barrera de defensa ante partículas contaminantes inhaladas, alérgenos y patógenos microbianos y regula tanto la inmunidad innata como la adquirida a través de la secreción de diferentes sustancias. El problema viene cuando, a causa de una enfermedad inflamatoria, como pueden ser la rinitis o la rinosinusitis, su función está alterada.


UTILIZARON LA TÉCNICA ALI


Para llevar a cabo el estudio, los investigadores han utilizado la técnica ALI, una interfase aire-líquido, que consiste en la exposición del cultivo de las células primarias al aire.


Así, después de obtener las células epiteliales de los donantes y de cultivarlas en estas condiciones, a las cuatro semanas las células primarias diferenciaron hacia los tres tipos celulares que forman el epitelio respiratorio: las células caliciformes, o productoras del moco; las células ciliares, que son las responsables del mecanismo de eliminación del moco y de las partículas provenientes del aire; y las células basales, que se encargan de la regeneración del tejido después de agresiones externas.


Una vez obtenidos los cultivos, estudiaron la diferenciación celular de la estructura epitelial, los diferentes fenotipos celulares y la función fisiológica o patológica de las células para saber si ésta estaba alterada.



De esta forma, los investigadores han demostrado la "gran plasticidad" de las células epiteliales, que son capaces de regenerar un tejido completo sin alteraciones en sus funciones. "Este modelo de cultivo 3D permitirá estudiar el origen y los mecanismos de acción implicados en las enfermedades inflamatorias de la nariz, como la rinitis, la rinosinusitis y la poliposis nasal, y utilizar esta tecnología en el desarrollo de nuevos fármacos para estas enfermedades", han asegurado los investigadores.


Francisco de Borja Callejas, Asunción Martínez-Antón, Isam Alobid, Mireya Fuentes, Julio Cortijo, César Picado, Jordi Roca-Ferrer , Joaquim Mullol. Reconstituted Human Upper Airway Epithelium as 3-D In Vitro Model for Nasal Polyposis. Plos One Published: June 19, 2014 DOI: 10.1371/journal.pone.0100537

Fuente: http://www.infosalus.com/

El 3% de la población presenta riesgo de reacción sistémica por picaduras de insectos

Un estudio reciente publicado en 'Immunology and Allergy Clinics of North America' afirma cómo la alergia al veneno de los himenópteros supone hasta el 34% de los casos de anafilaxia.

El 3% de la población española presenta riesgo de padecer una reacción sistémica por picadura de insectos, sobre todo los niños y especialmente en verano, según ha informado la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Asma y Alergia Pediátrica (SEICAP).
Una de las reacciones alérgicas más habituales es la que se produce al veneno de himenópteros (avispas o abejas), las cuales, tal como explica el miembro del Grupo de Trabajo de Educación Sanitaria de la SEICAP, Juan Carlos Cerdá, aparecen "rápidamente", a los pocos minutos de la picadura, y pueden ser de dos tipos, locales y sistémicas o generalizadas.
En este sentido, las locales se manifiestan con enrojecimiento, hinchazón y dolor de la zona afectada y, aunque pueden ser "muy intensas", si la inflamación no sobrepasa dos articulaciones, "no son peligrosas" y lo único que requieren es limpieza de la zona con agua y jabón.
Asimismo, se puede aplicar amoníaco y frío local, y suministrar antihistamínicos y corticoides. Ahora bien, el experto apostilla que, a veces, estas reacciones locales tienen que ver con la sensibilidad de la piel del niño, lo que conoce como dermografismo, y no con una reacción alérgica.
Por su parte, las reacciones sistémicas implican "gravedad" y síntomas más allá de la zona afectada, con aparición de urticaria generalizada, inflamación de ojos y boca, estornudos y mucosidad, lagrimeo, dificultad para tragar y respirar, mareos, bajada de tensión y pérdida de conocimiento.
"Es lo que se conoce como reacción anafiláctica, que puede ser muy peligrosa para la vida. Si un niño sufre esta reacción hay que administrarle rápidamente adrenalina intramuscular, si se dispone de ella, además de corticoides y antihistamínicos y se debe acudir de inmediato a urgencias para valoración por el equipo médico y completar el tratamiento si fuera necesario. Después debe ser remitido al Servicio de Alergia Pediátrica que le corresponda, para que pueda ser estudiado", aconseja.
Dicho lo cual, Cerdá expone que la alergia al veneno de los himenópteros puede aparecer a la siguiente picadura, por lo que es importante estar pendientes de los niños, ya que a veces en ellos una picadura de avispa o abeja puede pasar inadvertida. Un estudio reciente publicado en Immunology and Allergy Clinics of North America afirma cómo la alergia al veneno de los himenópteros puede representar hasta el 34% de los casos de anafilaxia.
El tratamiento suele durar entre 5 y 7 años y proporciona protección durante más de 10. Éste consiste, tanto en adultos como en niños, en una inmunoterapia específica con el veneno de estos himenópteros.



Consejos para evitar las picaduras
Por todo ello, los pediatras destacan la importancia de seguir una serie de pautas para evitar estas picaduras, como, por ejemplo, no espantar a los insectos con la mano, sacudir ropa y zapatillas antes de ponérselas, usar repelentes para la piel cuando se sale a la calle, en especial en sitios con vegetación, no usar cremas ni colonias demasiado perfumadas, vestir ropas poco coloridas y a ser posible con manga larga y pantalón largo, y evitar comidas al aire libre.
"Es preferible evitar lugares con mucha vegetación y aguas estancadas, donde este tipo de insectos son más abundantes, sobre todo al atardecer, que es cuando tienen mayor actividad, y si es posible, no andar descalzos sobre el césped, no realizar comidas en el campo al aire libre y no utilizar ropas de colores llamativos, ni perfumes, para no atraer a los insectos", ha recalcado el Dr. Cerdá.

Fuente: http://www.jano.es/

Los niños, los más propensos a sufrir reacciones alérgicas porpicaduras en verano

La población infantil es la más propensa a sufrir reacciones alérgicas por picaduras de mosquito, que aumentan durante la época estival, según ha recordado la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Asma y Alergia Pediátrica (Seicap).

Seicap aconsejó que los niños con alergia a los insectos extremen las precauciones en lugares al aire libre. A este respecto, un miembro del Grupo de Trabajo de Educación Sanitaria de la Seicap, el doctor Juan Carlos Cerdá, indicó que "es preferible evitar lugares con mucha vegetación y aguas estancadas, donde este tipo de insectos son más abundantes”.

miércoles, 30 de julio de 2014

Almirall acuerda una transacción estratégica con AstraZeneca en el área respiratoria

El acuerdo permite a Almirall evolucionar su estrategia en el área respiratoria para maximizar el retorno y el valor de sus activos y capacidades. Al mismo tiempo, refuerza su posición financiera para dar apoyo al crecimiento del área de dermatología y otras especialidades.




Almirall ha comunicado hoy que, sujeto a previa consulta habitual y aprobación de procedimientos, ha llegado a un acuerdo para transferir a AstraZeneca los derechos de la franquicia respiratoria de Almirall por un valor inicial de $875 millones pagaderos al cierre del acuerdo más pagos futuros que pueden alcanzar $1.220 millones vinculados a hitos de desarrollo, lanzamiento de nuevos productos y ventas. AstraZeneca ha acordado también varios pagos relacionados con ventas.

Al cierre de la transacción, AstraZeneca será propietaria de los derechos de desarrollo, y comercialización del negocio respiratorio actual de Almirall incluyendo derechos por ingresos procedentes de alianzas con terceros, así como el pipeline en investigación de nuevas terapias.  La franquicia incluye Eklira®(aclidinium); LAS40464, la combinación de aclidinium+formoterol que ha sido presentada a registro en EU y está siendo desarrollada en EEUU; LAS100977 (abediterol), un beta2-agonista de larga duración de una toma diaria (LABA) en Fase II; una plataforma M3 antagonista beta2-agonista (MABA) en desarrollo pre-clínico (LAS191351, LAS194871) y un Fase I (LAS190792); además de múltiples programas pre-clínicos. Bajo este acuerdo, Almirall Sofotec, una subsidiaria de Almirall centrada en el desarrollo de avanzados inhaladores, será también transferida a AstraZeneca.

Esta operación refuerza la posición financiera de Almirall y tendrá resultados positivos inmediatos.

El pipeline de Almirall basado en activos respiratorios noveles y las capacidades de su inhalador fortalecen el portfolio respiratorio de AstraZeneca que incluye Symbicort® y Pulmicort®, así como los productos de la compañía que están actualmente en investigación. La incorporación de aclidinium y la combinación de aclidinium+formoterol, administrados con el inhalador Genuair®, permitirán a AstraZeneca ofrecer a los pacientes la elección entre distintos inhaladores a través de una gama de distintas moléculas y combinaciones.

Almirall y AstraZeneca anticipan que, sujeto a consultas locales con representantes de los trabajadores y legislación correspondiente, un número significativo de empleados dedicados al negocio respiratorio, incluyendo los empleados de Almirall Sofotec, serán transferidos a AstraZeneca.

Jorge Gallardo, Presidente of Almirall ha comentado: "Este importante acuerdo permite desarrollar mejor nuestros activos y conocimientos en respiratorio con una compañía de tanta experiencia en este campo como es Astrazeneca. Igualmente, nos permite equilibrar mejor los costes, riesgos y retornos de la franquicia respiratoria, al tiempo que retenemos importantes derechos económicos en su éxito futuro. Todo ello constituye una base muy sólida para movernos de manera más agresiva hacia el área de especialidades y particularmente para convertirnos en una compañía global en dermatología. I+D permanecerá como un elemento clave de negocio en Almirall y esperamos que ayude de manera significativa al crecimiento a largo plazo."

Pascal Soriot, Chief Executive Officer de AstraZeneca ha comentado: “Nuestro acuerdo con Almirall aporta valor estratégico y a largo plazo a la sólida franquicia respiratoria de AstraZeneca, una de nuestras plataformas de crecimiento clave. Nos beneficiaremos a corto plazo del crecimiento en los ingresos que anticipamos tendrá rápidamente resultados positivos sobre beneficios. La enfermedad respiratoria crónica afecta cientos de millones de personas en todo el mundo. Combinando nuestro innovador portfolio y capitalizando las capacidades científicas y comerciales de AstraZeneca a nivel global, fortaleceremos nuestro amplio espectro de soluciones para el cuidado del asma y la EPOC. Estoy deseando dar la bienvenida a los empleados de Almirall que se unan a nuestra compañía”

La transacción está sujeta  a las correspondientes autorizaciones, condiciones y términos en materia de normativa de competencia y anti-monopolio. Ambas compañías anticipan que la operación se completará antes de finales de 2014.

Acerca de la EPOC

EPOC (Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica) es una enfermedad progresiva asociada principalmente al uso del tabaco, la polución atmosférica o contaminación en el ambiente laboral, que pueden causar la obstrucción de las vías aéreas y la disminución de la capacidad respiratoria. Afecta a unos 210 millones de personas en todo el mundo y se prevé que sea la tercera causa de muerte en 2020. Aunque con frecuencia se considera que la EPOC es una enfermedad de personas con edad avanzada, se estima que el 50% de los pacientes con EPOC actualmente tienen entre 50 y 65 años, lo que significa que la mitad de la población con EPOC es probable que se vea afectada en un momento de sus vidas en el que están en el punto álgido de su potencial económico y probablemente tienen importantes responsabilidades familiar.

Acerca del Asma

El asma es una enfermedad crónica inflamatoria de las vías aéreas en la cual los bronquios se estrechan de forma reversible. Afecta a personas de todas las edades y es una de las principales causas de morbilidad y mortalidad en el mundo. El asma puede ser alérgico (como respuesta inmunitaria a alérgenos inhalados como el polen, las esporas de hongos, o los ácaros del polvo) o no-alérgico (inducido por el ejercicio físico, la tos, las infecciones respiratorias virales, o por la inhalación de humo o químicos en el lugar de trabajo). La contracción de las vías aéreas característica de las personas con asma es una respuesta del sistema inmune al factor que desencadena el asma.

El asma severa persistente está clasificada por la frecuencia de los síntomas durante el día y la noche, el uso de inhaladores para aliviar los síntomas, el impedimento a realizar tareas diarias, los medidores de flujo respiratorio o por si las exacerbaciones asmáticas requieren el uso de corticosteroides inhalados (ICS) más de dos veces al año. El tratamiento del asma normalmente incluye un ICS que reduce la inflamación de las vías aéreas para prevenir los síntomas del asma y las exacerbaciones, combinado con broncodilatadores â2 agonistas de acción prolongada y un âagonista de corta acción u otros broncodilatadores para el alivio de los síntomas.

Almirall

Almirall es una compañía global con sede en Barcelona dedicada a ofrecer medicamentos valiosos a través de su I+D y de acuerdos y alianzas. Nuestra labor cubre toda la cadena de valor del medicamento. Un consolidado crecimiento rentable nos permite destinar nuestro talento y rigor a las áreas de respiratorio y dermatología, con un interés adicional en gastroenterología y dolor. Tenemos un tamaño que nos concede la agilidad y flexibilidad para lograr el propósito de llevar nuestros innovadores productos allí donde sean necesarios.

Almirall, fundada en 1943, cotiza en la bolsa española (ticker: ALM) y es fuente de creación de valor para la sociedad gracias a la visión y el compromiso a largo plazo de sus accionistas de referencia. En 2013, generó unos ingresos totales de 825 millones de euros y, con más de 3,000 empleados, posee una afianzada y progresiva presencia en Europa, además de EEUU, Canadá y México. Más información en www.almirall.com

AstraZeneca

AstraZeneca es una compañía farmacéutica global e innovadora centrada en el descubrimiento, desarrollo y comercialización de medicamentos bajo prescripción médica, principalmente para el tratamiento de enfermedades cardiovasculares, metabólicas, respiratorias, inflamatorias, autoinmunes, oncológicas, infecciosas y neurológicas. AstraZeneca opera en más de 100 países y sus medicamentos innovadores son usados por millones de pacientes en todo el mundo. Para más información visite www.astrazeneca.com


Fuente: 



Un estudio sugiere la existencia de un fenotipo que favorece exacerbaciones graves en pacientes con asma bronquial

Una investigación desarrollada por especialistas de Neumosur y liderada por el doctor Francisco Javier Álvarez Gutiérrez ha estudiado los factores predictivos de exacerbación grave en una cohorte de pacientes con asma bronquial, llegando a la conclusión de que puede existir un fenotipo que favorece esas exacerbaciones, "independientemente de otros parámetros clínicos, funcionales o de inflamación". La investigación acaba de ser publicada en la Revista Española de Patología Torácica de Neumosur, indexada a las principales publicaciones internacionales.


En un comunicado, se ha explicado que concretamente, el estudio fue realizado sobre una muestra de 330 pacientes mayores de 12 años con asma bronquial, que fueron seguidos en cuatro visitas. Se recogieron parámetros clínicos --gravedad de la enfermedad, control de síntomas [test ACT], control según GINA, atopia--, funcionales --espirometría con test broncodilatador--, inflamatorios --determinación de la fracción exhalada de óxido nítrico-FeNO--, exacerbaciones graves, definidas como aquéllas que necesitaron ciclo de esteroides orales, visitas a urgencias u hospitalizaciones por asma, y se compararon los datos de pacientes que presentaron alguna exacerbación grave con aquéllos que no lo presentaron.


Finalizaron el seguimiento un total de 330 pacientes, mayoritariamente con asma leve persistente y moderada (más del 80%), mujeres (casi el 70%) y atópicos (más del 76%). Presentaron una exacerbación grave durante el seguimiento el ocho por ciento de todos los pacientes, y el análisis encontró como factor principal predictivo las exacerbaciones previas y como posible factor a considerar el grado de control estimado por el control de síntomas (ACT).


Las exacerbaciones de asma son eventos importantes que repercuten en la evolución del paciente. Aunque en los diversos estudios se han utilizado diferentes definiciones de agudización de asma, se ha establecido que la exacerbación grave incluye a aquéllas que requieren una intervención urgente, definida por la prescripción de esteroides sistémicos --oral o inyectado--, visitas a urgencias u hospitalización por los síntomas. Es una parte componente fundamental del concepto actual de riesgo futuro, que es necesario reducir para conseguir el control efectivo de la enfermedad.


Asimismo, hay diversos estudios publicados que han evaluado qué factores pueden predecir las exacerbaciones graves. Evaluar estos elementos puede ser importante para tratar de reducir el impacto de la agudización. A pesar de que existen bastantes trabajos que han evaluado los factores predictivos de exacerbaciones de asma, la mayor parte de los publicados en los últimos años incluyen pacientes, o bien que acuden a servicios de urgencias, o que presentan asma grave o "casi fatal", existiendo escasos trabajos que evalúen los factores predictivos de exacerbación en pacientes seguidos de forma habitual en una consulta externa neumológica, y menos aún en nuestro país.


Este nuevo estudio tiene la novedad de evaluar mayoritariamente a pacientes con asma leve o moderada persistente. Es su principal novedad, pero también su principal limitación, pues no se incluyeron pacientes con mayor gravedad o con un número más importante de exacerbaciones previas, "con los que posiblemente hubiéramos encontrado otros factores predictivos asociados", han señalado los autores, que no obstante estiman que "los resultados sí pueden ser extrapolados a la población evaluada --asma leve-moderada persistente, seguida en consultas externas neumológicas-- y sugieren que puede haber "un perfil o fenotipo de paciente que presente exacerbaciones, independientemente de otros parámetros clínicos, funcionales o de inflamación".


La investigación acaba de ser publicada en la Revista Española de Patología Torácica de Neumosur






martes, 29 de julio de 2014

Leti lanza al mercado Mobile Chamber Experts, su nueva marca junto a Allergopharma y Stallergenes

Leti, Allergopharma y Stallergenes han desarrollado y lanzado al mercado cámaras móviles que facilitarían significativamente la investigación en alergia


La compañía española Leti ha creado una joint venture con la alemana Allergopharma y la francesa Stallergenes para el diseño y comercialización de cámaras móviles -mobile chambers- de exposición ambiental para la investigación en alergias. Como ya ha informado CF, la Comisión Europea ha confirmado que la integración de las tres en la nueva joint venture y su actividad no plantea problemas de competencia.


Jaime Grego, presidente de Leti, explica a este periódico que las tres están en proceso de constituir una nueva empresa, Mobile Chamber Experts, que llevará a cabo el desarrollo y la explotación de las cámaras. Las fundadoras prevén ser también clientes, puesto que "la nueva compañía operará de forma independiente de sus socios y estará plenamente abierta para ofrecer sus servicios a otras firmas con interés en este campo". Mobile Chamber Experts tendrá su sede en Alemania y ofrecerá sus servicios internacionalmente, para lo que previsiblemente creará nuevos puestos de trabajo altamente especializados.


La alianza pretende "aportar una vía eficaz que puede facilitar significativamente la investigación en alergia". Las mobile chambers garantizan un entorno de exposición al alérgeno medido, uniforme, controlado, reproducible y seguro. "Es un proyecto realmente ilusionante", afirma Grego. "Se trata de una aportación de valor en este campo de la medicina que, además, pondremos al alcance de las compañías del sector".


En concreto, Mobile Chamber Experts instalará cámaras de exposición ambiental y las pondrá a disposición de compañías especializadas en alergología. "Inicialmente, las cámaras estarán focalizadas en la exposición controlada a alergizantes como pólenes y ácaros".


"Una vez validado el concepto -añade- y probado que en estas cámaras se consigue una exposición equivalente a la de las condiciones naturales, el propósito es demostrar a las autoridades regulatorias el papel relevante que pueden tener en el desarrollo de medicamentos para las alergias, ofreciendo una mayor previsibilidad al proceso y reduciendo su coste".


MOVILIDAD
Además, la movilidad de las cámaras, que se podrán acercar a diferentes puntos geográficos en lugar de tener que desplazar todos los pacientes en estudio a un solo centro, facilita la logística de los ensayos clínicos.


Grego no descarta que en un futuro las mobile chambers se puedan usar "para la exposición controlada de otro tipo de pacientes sometiéndoles, por ejemplo, a sustancias contaminantes en entorno rigurosamente controlado".

Enfermedad alérgica ocular

INTRODUCCIÓN

La alergia ocular afecta aproximadamente a 20% de la población en Estados Unidos, es uno de los trastornos más frecuentes con los que se enfrentan el pediatra y el oftalmólogo. Los pacientes con alergia ocular presentan inflamación bilateral del párpado y la conjuntiva, la cual pueden asociarse con rinitis, asma y otras condiciones atópicas. La enfermedad alérgica del ojo se clasifica en conjuntivitis alérgica estacional (SAC), conjuntivitis alérgica perenne (PAC), queratoconjuntivitis vernal (VKC), queratoconjuntivitis atópica (AKC), blefaroconjuntivitis de contacto y conjuntivitis papilar gigante. Los síntomas predominantes son el prurito y el eritema, puede estar presente la descarga mucinosa o la fotofobia. Si se encuentra dolor, alteración de la visión, involucro de la córnea o los síntomas no mejoran con el tratamiento, el clínico debe referir al paciente con el oftalmólogo. El entendimiento básico de la anatomía se requiere para apreciar los elementos diagnósticos claves. El tratamiento inicial involucra una combinación de antihistamínicos tópicos y estabilizadores de los mastocitos. Los antiinflamatorios no esteroideos tópicos (AINES) y los esteroides tópicos de potencia media deben ser prescritos de manera ideal por el oftalmólogo, por ser medicamentos con complicaciones que son difíciles de reconocer sin un examen oftálmico detallado.


CLASIFICACIÓN


Conjuntivitis alérgica estacional


Epidemiología y factores de riesgo


La conjuntivitis alérgica estacional (conjuntivitis de la “fiebre del heno”) representa 25-50% de los casos de alergia ocular, es la enfermedad alérgica más común del ojo. La SAC se asocia a la hipersensibilidad a aeroalérgenos, como al polen del árbol (al inicio de la primavera), polen de malezas (de agosto a octubre), hongos extramuros, pastos (de mayo a julio) u otros antígenos del ambiente dependientes de la distribución geográfica. La conjuntivitis alérgica estacional es más grave durante la primavera, el verano y a principios del otoño, cuando los niveles de polen son altos.


Fisiopatología


La conjuntivitis alérgica estacional se clasifica como reacción de hipersensibilidad tipo 1, causada por la unión de los aeroalérgenos aéreos como el polen a los receptores IgE en los mastocitos, la cual conlleva a la degranulación de los mastocitos del subtipo MCT. La liberación de los mediadores proinflamatorios atrae eosinófilos y basófilos.


Presentación clínica


La conjuntivitis alérgica estacional es bilateral, con inicio agudo o subagudo y picos que corresponden a la variación estacional en los antígenos aéreos. El prurito es el síntoma principal, aunque el lagrimeo, la fotofobia y la sensación de ardor pueden estar presentes. Los párpados y la conjuntiva se involucran de manera típica. El involucro conjuntival se puede presentar como quemosis (edema) e inyección (eritema), en la mayoría de los casos la quemosis es más impresionante que la inyección. El involucro corneal es raro, pero puede estar presente queratitis epitelial punteada leve (pequeños puntos secos en la córnea).


Conjuntivitis alérgica perenne


Epidemiología y factores de riesgo


La conjuntivitis alérgica perenne tiene una presentación clínica similar a la SAC, aunque más leve por lo general. Sin embargo, los alérgenos en este caso son más frecuentes de tipo extramuros como los ácaros del polvo, la caspa de animales y los hongos. Por consiguiente, no se presenta de manera uniforme una distribución estacional definitiva. La condición puede asociarse con el síndrome de ojo seco, la cual a menudo no se diagnostica en la población pediátrica.


Fisiopatología


Como la SAC, la PAC es mediada por la degranulación de los mastocitos (MCT) por la IgE de mediadores proinflamatorios con el reclutamiento de eosinófilos.


Presentación clínica


Los pacientes con PAC tienen presentación clínica más leve que aquellos con SAC, y el prurito es el síntoma predominante. La quemosis es más a menudo más impresionante que la inyección conjuntival, pero ambas tienden a estar presentes. Se observa una reacción papilar fina en la conjuntiva palpebral (Fig. 1). El síndrome de ojo seco puede exacerbar la condición y requerir tratamiento separado. El involucro corneal es raro en la PAC y usualmente se identifica sólo en casos simultáneos de PAC y síndrome de ojo seco.


Queratoconjuntivitis vernal


Epidemiología y factores de riesgo


La queratoconjuntivitis vernal representa 0.5% de las enfermedades alérgicas oculares. La queratoconjuntivitis vernal afecta principalmente a niños y adolescentes con edades de 11 a 13 años, con predominio en el sexo masculino. Los factores ambientales y genéticos desempeñan un rol en el proceso de la enfermedad. Aproximadamente 50% de los pacientes tienen antecedentes de atopia como asma, rinitis alérgica o eccema. La queratoconjuntivitis vernal es más común en climas calientes y secos.


Fisiopatología


Aunque se desconoce la fisiopatología precisa, las reacciones de hipersensibilidad tipo I y IV contribuyen a la patogénesis, con la estimulación antigénica que conduce a la activación del linfocito (principalmente células T cooperadoras tipo 2 [Th2]) con infiltrado intenso de eosinófilos. En contraste, las células de gobblet se incrementan con elevación de los niveles de mucina-5AC (MUC5AC), y por ende se observa moco abundante con esta condición.


Presentación clínica


El prurito intenso bilateral es el síntoma principal de esta condición, a menudo acompañado de fotofobia y descarga abundante. Existen dos formas anatómicas: (1) palpebral, con papilas gigantes en el tarso superior (>1 mm, a menudo de 7-8 mm), que dan un aspecto de “empedrado” en la superficie de un párpado evertido (Fig. 2), y (2) conjuntivitis bulbar limbal, la cual crea unos montículos gelatinosos eosinofílicos (conocidos como puntos de Trantas) en el limbo (Fig. 3). Estos hallazgos se pueden identificar sin el aumento oftalmológico. El edema de párpados es simultáneo con la inyección conjuntival. De manera importante, 5% de los pacientes tendrá involucro corneal, lo que puede llevar a disminución de la visión. Si no se trata, el involucro corneal de forma eventual puede terminar en cicatrices permanentes. La papila gigante en la superficie tarsal superior puede causar trauma mecánico o “fricción” de la córnea. Se requiere un examen con lámpara de hendidura para identificar los siguientes hallazgos:


* Queratopatía superficial punteada: pequeñas áreas puntiformes de captación de fluoresceína en la mitad superior de la córnea.


* Macroerosiones corneales y/o úlceras escudo: infiltrado estéril con pérdida del epitelio suprayacente que conduce a parches que se tiñen de forma intensa en la mitad superior de la córnea.


* Formación de pannus superficial y opacificación de la córnea adyacente al limbo superior.


La disminución de la visión o la sospecha de involucro corneal deben referirse de inmediato a un oftalmólogo para valoración adicional.


Queratoconjuntivitis atópica


Epidemiología y factores de riesgo


La queratoconjuntivits atópica es un trastorno inflamatorio crónico grave que es más común en pacientes adultos con edades entre 20 a 50 años, con predominio en el sexo masculino. Algunos pacientes pueden prevenirla en una edad muy joven. Los antecedentes  personales y familiares son significativos para las enfermedades atópicas en 95% de los pacientes, donde la dermatitis atópica es el trastorno más asociado.


Fisiopatología


La inmunopatología es compleja, con reacciones de hipersensibilidad tanto tipo I como IV que contribuyen a la enfermedad. A diferencia de la VKC, hay una reducción en células de goblet que secretan MUC5AC.


Presentación clínica


Los síntomas de la AKC incluyen prurito, ardor, lagrimeo y párpados eritematosos/edematosos. Los párpados tienen una apariencia eccematosa y se puede encontrar madarosis (pérdida de las pestañas) por el rascado. El edema palpebral crónico produce un pliegue clásico de Dennie-Morgan en el párpado inferior o unas “ojeras alérgicas”.


A diferencia de la VKC, la conjuntiva tarsal inferior es más probable que presente papilas más pequeñas (<1 mm). La inflamación crónica puede dar lugar a adherencias (simblefarones) en el fondo del saco inferior. Las complicaciones corneales están presentes en muchos pacientes con este trastorno, y pueden incluir queratitis punteada epitelial (más prominente en la parte inferior de la córnea), formación de pannus, y ulceración franca. Los pacientes con AKC tienen una mayor susceptibilidad a la queratitis herpética, que puede ser grave y amenazar la visión.


Blefaroconjuntivitis de contacto


Epidemiología y factores de riesgo


La blefaroconjuntivitis de contacto es secundaria a la reexposición a cosméticos, químicos y algunas plantas del hogar (Tabla 2). Afecta pacientes con y sin atopia.


Fisiopatología


La blefaroconjuntivits por contacto es un tipo de respuesta de hipersensibilidad IV en la que el alérgeno sirve como hapteno (antígeno incompleto) y se combina con otras proteínas para formar un antígeno inmunológicamente activo. Las células de Langerhans, que son células presentadoras de antígeno del complejo mayor de histocompatibilidad tipo 2, presentan antígenos a las células T cooperadoras tipo 1 (Th1) en los nódulos linfáticos regionales. La fase de sensibilización se desarrolla en semanas o meses, y la célula T sensibilizada migra a la superficie ocular y libera citocinas y promueve la quimiotaxis de otras células inflamatorias. A diferencia  de la SAC y la PAC, en las que la inflamación ocurre dentro de 2 a 3 horas, la reacción a los agentes ofensores toma de 48 a 72 horas. Esta reacción debe diferenciarse de aquellas por sustancias tóxicas o sustancias irritatitivas mecánicas, que se manifiestan dentro de 2 a 3 horas.


Presentación clínica


La blefaroconjuntivitis por contacto se caracteriza por síntomas de prurito y ardor. La conjuntiva a menudo está involucrada, y el párpado tiene una apariencia eccematosa aguda y eritematosa y. La frase crónica conduce a la liquenificación del párpado. La conjuntiva puede tener un aspecto folicular o papilar. La parte inferior de la córnea puede demostrar queratitis punteada superficial, por lo general en la mitad inferior donde se alberga la sustancia nociva.


Conjuntivitis papilar gigante


Epidemiología y factores de riesgo


La conjuntivitis papilar gigante se presenta con más frecuencia en usuarios de lentes de contacto. Los pacientes con historia de atopia tienen mayor riesgo, y los materiales como los lentes de contacto, las prótesis oculares, el material de sutura o los cuerpos extraños son a menudo el elemento disparador.


Fisiopatología


El trauma mecánico del epitelio de la conjuntiva estimula una respuesta mediada por linfocitos Th2. Un componente alérgico puede involucrarse cuando se deposita proteína en el lente de contacto o las prótesis que sirven como alérgenos crean una respuesta de hipersensibilidad tipo 1. De manera alternativa, los depósitos de proteínas pueden fungir como haptenos y crear una respuesta de hipersensibilidad tipo IV en algunos casos.


Presentación clínica


El cuerpo extraño o el lente de contacto pueden estar en uso por meses o años antes de que aparezcan los síntomas. Lo síntomas consisten en prurito intenso, descarga mucosa y fotofobia. Las papilas gigantes (>1 mm) por lo general se presenten en la superficie tarsal adyacente al cuerpo extraño. El retiro del cuerpo extraño, el cese del uso de lentes de contacto o el cambio a otro tipo de lentes de contacto pueden aliviar los síntomas.


EVALUACIÓN CLÍNICA


Historia


La historia debe incluir el inicio, la duración, los factores exacerbantes, los factores atenuantes y los episodios previos, con atención a la variación estacional. Deben evaluarse los tratamientos actuales o previos, e incluir duración y apego. Los antecedentes familiares y personales de atopia (asma, eccema, o rinitis alérgica) deben evaluarse. Se debe preguntar acerca de mascotas nuevas, reubicaciones recientes, proyectos de remodelación, u otras exposiciones en la casa. El síntoma predominante es el prurito y la condición usualmente es bilateral (puede ser asimétrica). La manifestación de dolor importante o alteración de la visión no relacionada al lagrimeo debe alertar al clínico para causas alternativas. El clínico debe preguntares si el paciente tuvo contacto reciente con otras personas con conjuntivitis para descartar un probable origen infeccioso.


Exploración


La exploración debe incluir la evaluación del cuerpo completo en busca de otras lesiones de piel (eccema) o el involucro de las membranas mucosas. La exploración debe incluir palpación en busca de linfadenopatías preauriculares o submandibulares y cervicales, porque estos hallazgos son más consistentes con un origen infeccioso. Debe medirse la agudeza visual corregida monocular (con el niño con gafas si éstas están estropeadas) con una tarjeta cercana o a distancia. Las pupilas deben examinarse para cualquier evidencia de defecto aferente pupilar o asimetría. Los movimientos extraoculares deben evaluarse. La piel de los párpados debe examinarse y palparse. La conjuntiva del párpado superior e inferior debe inspeccionarse para una reacción papilar o la presencia de un cuerpo extraño. Por último, debe colocarse la fluoresceína en ambos ojos y examinarse bajo luz azul apropiada para cualquier tinción que indicaría involucro corneal.


Diagnóstico Diferencial


El diagnóstico diferencial incluye la conjuntivitis infecciosa, el origen autoinmune (uveítis, esclerosis), el síndrome de ojo seco y, menos común, el glaucoma congénito. Los hallazgos históricos distintivos y en la exploración se enumeran en la Tabla 3.


TRATAMIENTO


Evitar el antígeno causal es la modificación primaria de la conducta para todas las formas de la conjuntivitis alérgica. Un alergólogo puede ayudar a determinar los alérgenos específicos que intervienen en los casos graves con pruebas cutáneas o por RAST. Las lágrimas artificiales pueden ayudar a diluir los alérgenos y los agentes inflamatorios, y las compresas frías pueden ayudar en el tratamiento inicial. Cuando las estrategias para evitar el alérgeno primario y las medidas no farmacológicas no logran controlar los síntomas, pueden considerarse los medicamentos de venta libre y los agentes farmacológicos tópicos con receta. Los pilares del tratamiento tópicos por otros médicos no oftalmólogos son principalmente los antihistamínicos y los estabilizadores de los mastocitos. En general, los antihistamínicos de segunda generación son superiores a los de primera generación (ver Tabla 4). La lodoxamina es más potente que el cromoglicato como estabilizador de los mastocitos y tiene acción más rápida. La combinación de medicamentos como la olopatadina, el ketotifeno y la epinastina es eficaz en controlar tanto los síntomas agudos (acción H1) y como profilaxis (estabilización de los mastocitos), y también aumenta la adherencia debido a la frecuencia reducida de las dosis. Los descongestivos tópicos deben evitarse (oximetazolina, nafazolina, tetrahidrozolina, fenilefrina). Aunque causan vasoconstricción y reducen el eritema inicial, pueden causar hiperemia por rebote y blefaroconjuntivitis por contacto por el uso agudo y prolongado respectivamente. En general, los AINES tópicos y los agentes inmunosupresores (esteroides, tacrolimus) deben prescrirse por un oftalmólogo.


En términos del tratamiento sistémico, los antihistamínicos de primera generación no se recomiendan por sus efectos sedantes y actividad colinérgica. Sin embargo, los antihistamínicos de segunda generación se usan de forma amplia para la rinoconjuntivitis alérgica y pueden prescrirse si se observan síntomas sistémicos. De manera importante, los antihistamínicos sistémicos de segunda generación pueden causar deficiencia acuosa de lágrimas y síntomas de ojo seco que pueden exacerbar incluso los síntomas oculares.


SECUELAS DEL PROBLEMA


La resolución depende de la evitación del alérgeno y/o el cumplimiento con el tratamiento apropiado. La secuela más seria es el involucro corneal que puede causar cicatrices y deterioro en la agudeza visual. Con la destrucción del epitelio con involucro corneal, el paciente tiene susceptibilidad aumentada de infección virales o bacterianas de la córnea. Si hay evidencia de involucro corneal o deterioro de la visión debe referirse de manera inmediata a un oftalmólogo.


Utz y Kaufman. Allergic Eye Disease. Pediatric Clinics of North America Volume 61, Issue 3 , Pages 607-620, June 2014



Centro Regional de Alergia e Inmunología Clínica CRAIC, Hospital Universitario “Dr. José Eleuterio González” UANL, Monterrey, México


Dra. med. Sandra N. González Díaz        Jefe y Profesor


Dra. Marisela Hernández Robles             Profesor


Dra. Bárbara Elizondo Villarreal               Residente 1er Año


Dra. Alejandra Macías Weinmann            Profesor


 

lunes, 28 de julio de 2014

Evaluación y tratamiento de la tos crónica

 

INTRODUCCIÓN


La tos es uno de los síntomas más comunes por los que los pacientes buscan atención médica en los Estados Unidos. En 2010, hubo un estimado de 30 millones de consultas y se gastaron $600 millones en medicamentos de prescripción y venta libre para la tos. Como parte de los mecanismos de defensa del cuerpo contra las infecciones respiratorias y los irritantes inhalados, la tos es un evento universal y natural y afortunadamente en la mayor parte de las personas se resuelve poco tiempo después de que desaparece el factor desencadenante, por lo general, dentro de 3 semanas (llamada tos aguda). Sin embargo, en algún punto, muchos adultos que no fuman presentan tos subaguda que dura 4 a 7 semanas y hasta una cuarta parte de los pacientes presentarán tos crónica, definida como aquella que dura 8 semanas o más. Identificar una causa y dar tratamiento a una persona con tos crónica es un reto para los médicos, y en respuesta en 1998 el Colegio Americano de Médicos del Tórax (American College of Chest Physicians, ACCP) desarrolló lineamientos de práctica clínica para proveer un abordaje sistemático del diagnóstico y el tratamiento de la tos crónica, el cual se revisó de manera subsecuente en 2006.


UNAS POCAS PALABRAS SOBRE TOS AGUDA.


La causa más común y más importante de tos aguda es la bronquitis aguda, la cual es viral más a menudo.  Las neumonías por Mycoplasma y Chlamydia son la causa en 1% a 5% de los adultos jóvenes. Muchos pacientes buscan atención médica para tos aguda y creen que necesitan antibióticos. Parte de las razones por las cuales los pacientes buscan evaluación y piden tratamiento con antibióticos es una percepción equivocada de la duración “normal” de la tos que se presenta como consecuencia de una infección respiratoria alta. En un estudio en el que se exploró la percepción de los pacientes sobre cuánto debe durar la tos, los participantes pensaban que la duración promedio de la tos era de 7 a 9 días en comparación con la duración promedio real de la tos de 17.8 días en la literatura publicada. Hay evidencia limitada que muestre alivio de la tos aguda con supresores de la tos como dextrometorfano y codeína. No hay evidencia de que los β agonistas sean de ayuda para la tos causada por bronquitis aguda en ausencia de asma. Lo más importante, no hay evidencia de que los antibióticos sean de beneficio en el tratamiento de la bronquitis aguda.


Presentación de caso. Una mujer de 52 años acude con su médico de atención primaria con una historia de 3 meses de tos seca. La tos empeoró durante el último mes y afecta al sueño de manera progresiva. Comenta que se siente avergonzada por su forma de toser en el trabajo y durante las reuniones sociales. Hace dos días, presentó vómito posterior a un paroxismo de tos, lo que motivó una visita médica.


IMPACTO DE LA TOS CRÓNICA


Una variedad amplia de complicaciones pueden ocurrir como consecuencia de la tos, como incontinencia urinaria, insomnio, agotamiento, cefalea, vómito, reflujo gastroesofágico, pérdida de apetito, hemorragia subconjuntival, dolor costal y dolor faríngeo. Rara vez, la tos vigorosa puede ocasionar complicaciones serias de salud tales como síncope, fractura costal, hernia inguinal o abdominal y rotura diafragmática. Más aún, el impacto sicológico y emocional puede ser profundo. En un estudio de adultos mayores con tos crónica, casi todos reportaron sentirse preocupados acerca de que “algo andaba mal” y un tercio expresó un miedo específico de cáncer. Casi la mitad estaban conscientes de sí mismos sobre su tos. Varios estudios de calidad de vida (CaV) demuestran que los pacientes tienden a presentar depresión, ansiedad y aislamiento social  asociados con la tos crónica. En particular, las mujeres que presentan incontinencia urinaria por estrés reportaron niveles más bajos de CaV y fueron más propensas a buscar atención médica por su tos crónica.


Presentación de caso, continúa. Su médico de primer contacto indaga más. Ella es una maestra de escuela y nunca fumó. No tiene comorbilidades significativas y no toma otros medicamentos actualmente. De manera específica, la paciente no tiene antecedente de virus de la inmunodeficiencia humana (VIH), cáncer, historia reciente de viajes o exposiciones ambientales. Además, no presentó  fiebre, hemoptisis, pérdida de peso o disnea asociados. Su examen físico es normal, lo que incluye ausencia de anormalidades en la boca, nariz, faringe, cuello, corazón y pulmones. Una radiografía de tórax en dos posiciones se reporta también normal


DIAGNÓSTICO DIFERENCIAL Y EVALUACIÓN INICIAL


La tos crónica puede ser el síntoma principal de una serie de enfermedades subyacentes, que incluye enfermedades con riesgo para la vida, tales como la enfermedad pulmonar obstructiva crónica, infecciones pulmonares atípicas, neoplasias, falla cardíaca y fibrosis pulmonar idiopática. Los médicos deben vigilar la presencia de posibles banderas rojas y factores de riesgo que pudieran indicar valoración a profundidad. Por ejemplo, un abordaje temprano para tuberculosis se indica en un paciente de un país endémico quien acude con hemoptisis y pérdida de peso no intencional. De igual manera, un paciente mayor con antecedente de uso de tabaco tiene un riesgo mayor de cáncer primario de pulmón. Se deben considerar metástasis pulmonares en pacientes con historia de cáncer. Más aún, la inmunosupresión y las condiciones de inmunodeficiencia, tales como la infección por VIH, vuelven a los pacientes más susceptibles a un espectro más amplio de infecciones pulmonares que incluyen hongos ambientales y bacterias. La tabla 1 menciona las enfermedades de riesgo y sus posibles asociaciones, para las que los médicos deben mantener vigilancia.


Otros elementos de la historia y el examen físico pueden ser de ayuda en sugerir una causa para la tos crónica. Por ejemplo, el hallazgo de sibilancias durante la exploración del tórax indicaría la práctica de pruebas de función pulmonar (PFP) o, de manera alternativa, tratamiento empírico dirigido al asma. Más aún, la producción significativa de esputo tiene mayor probabilidad de asociarse a un cáncer primario de pulmón. La percepción del sitio del cual se origina la tos (por ejemplo, un cosquilleo en la faringe versus en el tórax) puede ser desorientador y tiene poca correlación con la localización patológica real. Un estudio va todavía más allá, y sugiere que el carácter, la temporalidad y las complicaciones de la tos crónica son de poca ayuda diagnóstica. Sin embargo, es de importancia mencionar que los participantes en este estudio se reclutaron de una clínica de especialidad perteneciente a una universidad, y podrían no reflejar al paciente típico que acude a un nivel de atención primaria.


Hay 2 elementos de largo alcance en la historia a los que los médicos deben prestar especial atención: el uso de inhibidores de la enzima convertidora de angiotensina (IECA’s) y el tabaquismo. Aproximadamente 10% de los pacientes que utilizan IECA’s se afectarán; sin embargo, de acuerdo a series de China esta cifra puede subir hasta 44%. Las mujeres y los no fumadores parecen también tener la incidencia más alta. La frecuencia o la intensidad de la tos no parecen relacionarse con la dosis. Confirmar si un IECA es el responsable puede resultar retador. Sin embargo, una asociación temporal puede ser de ayuda si el medicamento se inició en el año previo y antes del inicio de la tos. En personas con predisposición, la tos se presenta de manera temprana después de la primera dosis, pero se reporta que ocurre después de semanas a meses de uso regular. Sin embargo, para complicar el panorama, existe la posibilidad de que la tos se desencadenara de manera original por una causa no relacionada que se resolvió (por ejemplo, una infección respiratoria o un irritante ambiental) pero que se potenció y extendió por el uso del IECA, que quizá se empezó más tarde. Por este motivo, los lineamientos del ACCP recomiendan que se suspenda el consumo de IECA’s sin considerar la relación temporal.


Los antagonistas de receptores de angiotensina causan tos de manera infrecuente, por lo que constituyen una buena alternativa. Se puede esperar que la tos se resuelva en 1 a 4 semanas después de la suspensión del IECA, aunque de forma ocasional puede permanecer por varios meses después.


Es de igual importancia preguntar sobre el tabaquismo, incluso de segunda mano, porque es altamente prevalente y es una causa común de tos crónica. La exposición al humo puede causar inflamación de las vías aéreas y secreciones excesivas, además de grados variables de obstrucción de la vía aérea. De manera clínica, la bronquitis crónica se define como tos productiva presente la mayoría de los días, por al menos tres meses en dos años consecutivos. Aunque existe una relación entre la dosis y la respuesta, y disminuir la cantidad de cigarrillos puede ayudar, los clínicos deben aconsejar a sus pacientes suspender el tabaquismo por completo debido a los otros riesgos bien conocidos para la salud. El uso conjunto de terapias de reemplazo de nicotina puede ser de ayuda. En la mayoría de los pacientes que dejan de fumar, se espera que la tos crónica se resuelva. Sin embargo, en los estadios avanzados de la EPOC la posibilidad de una recuperación completa a un estado basal disminuye.


Es esencial solicitar una radiografía de tórax como parte de la evaluación inicial de una tos crónica. Estadísticamente, en la mayoría de los casos será normal, pero una radiografía puede revelar causas específicas como infecciones atípicas o una masa pulmonar. Las pruebas de función pulmonar también pueden considerarse durante la evaluación inicial y pueden apuntar hacia el diagnóstico de EPOC, asma o enfermedad pulmonar restrictiva. Con una radiografía normal en un adulto sano que no usa IECAs y no fuma, por lo general por tres condiciones causan la tos crónica: el síndrome de tos de las vías aéreas superiores (STVAS), el asma o el reflujo gastroesofágico (ERGE). De hecho, la literatura actual sugiere que estas tres causas constituyen más de 90% de los casos de tos crónica. La bronquitis eosinofílica no asmática, la tos postinfecciosa atribuible a Bordetella pertussis, la apnea obstructiva del sueño y las bronquiectasias de una variedad de causas se reportan con menos frecuencia. Desafortunadamente, poca investigación se lleva a cabo en los centros de atención primaria, donde la prevalencia de estas enfermedades probablemente difiere de los informes publicados, que se basan en gran medida en las experiencias de los centros de atención secundaria y terciaria. También parece haber diferencias regionales. Al considerar que los estudios de los Estados Unidos y Europa reportan una prevalencia alta de la ERGE como causa principal de la tos, esto parece ser prácticamente inexistente en China y Japón, lo que tal vez refleja diferencias en la dieta, el hábito corporal, o ambas cosas.


Presentación de caso, continuación. La paciente tiene un gran alivio al saber que su radiografía de tórax es normal. Al considerar el siguiente paso, su médico comenta que la evaluación hasta el momento no reveló alguna causa obvia. En lugar de llevar a cabo otras pruebas, sin embargo, recomienda el tratamiento empírico dirigido a las 3 causas más comunes, y comienza con STVAS. Él le da una receta para difenhidramina 25 mg y 20 mg de fenilefrina, para tomarse cada 8 horas. El médico recibe una llamada telefónica de la paciente 3 semanas más tarde que afirma que su tos no se modificó a pesar de usar el antihistamínico y descongestionante de forma diaria. Considera la posibilidad de que ella tiene asma variante de tos y ordena exámenes de función pulmonar con espirometría pre y postbroncodilatador. Una semana más tarde, la paciente regresa a la oficina. Él le informa que los resultados de la espirometría fueron normales, sin demostrar obstrucción reversible al flujo aéreo. A pesar de esto, se recomienda comenzar el tratamiento para asma. Él le da una receta para utilizar un inhalador de salbutamol, 2 inhalaciones cada 6 horas, así como beclometasona, 2 inhalaciones cada 12 horas.


PANORAMA DEL TRATAMIENTO


El tratamiento debe dirigirse a la condición más probable según la historia, el examen físico y la radiografía de tórax. Sin embargo, cuando no es aparente una causa de tos crónica las directrices del ACCP recomiendan enfocarse de manera secuencial en las 3 condiciones más comunes, STVAS, asma y ERGE, por orden de prevalencia, antes de embarcarse en la búsqueda de diagnósticos menos frecuentes. Es de importancia que STVAS, asma y ERGE pueden presentarse cada uno con tos como único síntoma. Al considear que más de una de las causas mencionadas anteriormente pueden estar presentes, el ACCP recomienda que cada tratamiento empírico se agregue al anterior. En la práctica clínica, sin embargo, los autores encontraron que los pacientes a menudo se resisten al cada vez mayor número de medicamentos y se preocupan por la polifarmacia.


SÍNDROME DE TOS DE LA VÍA AÉREA SUPERIOR


STVAS se llamó de forma previa el síndrome de goteo nasal posterior, que por lo general se presenta con una sensación de secreciones que gotean en el pasaje nasal posterior y la pared faríngea. Puede acompañarse de congestión nasal, rinorrea, carraspeo frecuente, o globo faríngeo. El examen de la orofaringe puede revelar secreciones mucopurulentas que drenan de la nasofaringe o hipertrofia del tejido linfoide (empedrado). Dicho esto, los investigadores tuvieron problemas con el hecho de que estos signos y síntomas parecen correlacionar mal con la queja de la tos. Dada esta incertidumbre, los expertos abogan por la adopción del nuevo término, STVAS, en un intento de separar la noción de goteo retronasal de la tos atribuible a una causa de la vía aérea superior. Los factores subyacentes en la vía aérea superior incluyen rinitis alérgica, rinitis vasomotora, sinusitis, y rinitis medicamentosa, que es un efecto paradójico de rebote por el uso excesivo de descongestionantes nasales. Estos factores deben tomarse en cuenta según el caso, pero si no es evidente durante la evaluación inicial, se recomienda el tratamiento empírico para STVAS. El diagnóstico de STVAS se establece en retrospectiva, por la resolución de la tos en la respuesta a la terapia empírica. El tratamiento inicial de STVAS es una combinación de un antihistamínico de primera generación (por ejemplo, difenhidramina o clorfeniramina) y descongestionante (por ejemplo, pseudoefedrina o fenilefrina). Los antihistamínicos de segunda generación, a pesar de tener un perfil de efectos secundarios más favorables, parecen ser menos eficaces, tal vez a causa de su acción anticolinérgica limitada que ayuda a reducir las secreciones. Para los pacientes con rinitis o congestión nasal, la adición de corticoesteroides nasales, agentes anticolinérgicos nasales, o antihistamínicos nasales también puede ser eficaz.


ASMA VARIANTE TOS


Los síntomas típicos del asma son episodios intermitentes de sibilancias, opresión en el pecho, disnea y tos. Sin embargo, un subconjunto de los asmáticos tendrá asma variante tos, que se manifiesta como una tos crónica como el único síntoma con un examen físico por lo demás normal. En los estudios de pacientes con tos crónica y una radiografía de tórax normal, el asma representó aproximadamente un tercio de todas las causas. El asma variante tos es más común en los estudios realizados en China, donde es la causa más común de tos crónica. En pacientes con sospecha de tos como variante de asma, la espirometría es la prueba inicial y debe incluir el volumen espiratorio forzado en 1 segundo (VEF1), capacidad vital forzada (CVF), y la relación VEF1/CVF. La presencia de obstrucción de las vías respiratorias que mejora después de la administración de un agente broncodilatador es altamente sugestiva de asma. Los autores también recomiendan al mismo tiempo evaluar el volumen pulmonar y la capacidad de difusión, si la obstrucción de la vía aérea es irreversible, lo que apuntaría hacia un diagnóstico de EPOC. La obtención de mediciones precisas con las pruebas de función pulmonar requiere un alto nivel de esfuerzo por parte del paciente, y la tos no controlada durante la prueba hace que sea casi imposible. La imposibilidad de demostrar una obstrucción reversible de las vías respiratorias no excluye el diagnóstico de asma, y las pruebas de broncoprovocación, tales como la provocación por inhalación con metacolina, se pueden considerar para confirmar el diagnóstico. Por razones de seguridad, un FEV1 basal de al menos el 70% del valor teórico debe documentarse antes de la prueba de provocación bronquial. El valor predictivo negativo de una prueba de provocación con metacolina se reporta como cercano al 100%, por lo que un resultado negativo en esencia excluye asma. De acuerdo con la ACCP, si metacolina no está disponible o no se puede realizar, se indica el tratamiento antiasmático empírico. En términos de tratamiento, los pacientes deben educarse sobre los posibles factores desencadenantes, como el aire frío, los alérgenos ocupacionales, el humo, la caspa de animales, el polen, el ejercicio físico, y ciertos alimentos. Los corticoesteroides inhalados (ICSS), como la beclometasona o la fluticasona y los β-agonistas como el salbutamol son el tratamiento inicial recomendado. La evidencia para el tratamiento empírico de la tos crónica, sin embargo, es menos clara según una revisión Cochrane reciente. Los investigadores advierten contra el tratamiento empírico y abogan por una investigación a fondo para confirmar el diagnóstico antes de comenzar los corticoesteroides inhalados. En la práctica clínica, los autores obtienen pruebas de función pulmonar completas, pero incluso si éstas son negativas prescribirán ICS y un broncodilatador como prueba. El riesgo de efectos secundarios es bajo y los pacientes por lo general experimentan una mejora en 1 a 2 semanas del inicio si en verdad tienen asma variante tos. Además, los autores tienen cuidado de revisar la técnica correcta de los inhaladores y de manera rutinaria ofrecen una aerocámara para ayudar a maximizar la administración de fármacos a los pulmones. De vez en cuando la adición de un inhibidor de los receptores de leucotrienos tales como montelukast puede ayudar. Para la tos grave y refractaria, un curso corto (1 semana) de corticoesteroides orales puede considerarse. La falta de respuesta a estas terapias empíricas debe incitar al clínico a considerar otra causa; en contraste con las recomendaciones de la ACCP, los autores rara vez piden la prueba de reto con broncoprovocación, ya que añade poco al diagnóstico.


Presentación de caso, continuación. La paciente regresa 4 semanas más tarde. Lamentablemente, los inhaladores no mejoraron su tos. Ella vive con la tos durante casi 5 meses y está muy desalentada por la falta de mejoría. Su médico le pregunta de nuevo sobre los síntomas relacionados con la tos. Ella niega cualquier disnea asociada, dolor, fiebre, pérdida de peso, acidez o dispepsia. Explica que después de dirigirse a STVAS y el asma, la ERGE persiste como una gran posibilidad como causa de la tos crónica, incluso sin ningún tipo de síntomas gastrointestinales. A sugerencia suya, ella está de acuerdo agregar un inhibidor de bomba de protones (PPI) diario. Además, le ofrece una enviarla con un neumólogo.


ENFERMEDAD POR REFLUJO GASTROESOFÁGICO


Se piensa que la ERGE desencadena tos cuando el contenido gástrico fluye hacia atrás a través de un esfínter esofágico inferior (EEI) relajado hacia el esófago, la laringe y el tracto respiratorio. Se demostró reflujo fisiológico y microaspiraciones en personas asintomáticas, y por lo tanto no está claro por qué ciertas personas parecen tener mayor sensibilidad para la tos en respuesta a este disparador. De manera intuitiva, es fácil imaginar cómo la acidez gástrica podría irritar y desencadenar a los receptores de la tos situados en el tracto respiratorio y el esófago. Varios experimentos demostraron que la infusión de solución de ácido en el esófago distal de sujetos normales puede producir tos. Sin embargo, hay una creciente evidencia, que incluye una revisión Cochrane de 2011, que la terapia de supresión de ácido, aunque útil para la acidez estomacal y la dispepsia, mejora el síntoma de la tos en sólo una minoría de pacientes. Con tantas preguntas sin respuesta acerca de la patogenia de la tos relacionada con la ERGE, el uso del término enfermedad de reflujo, que es más general, se prefiere sobre el de enfermedad de reflujo ácido.


La frecuencia de la ERGE como el factor causante de la tos crónica es poco clara. Los informes publicados varían de manera considerable y oscila entre 0% y 73%, lo que, posiblemente, puede reflejar las diferencias regionales en la prevalencia y la heterogeneidad en los métodos de diagnóstico. El establecimiento de una relación de causalidad se complica por el hecho de que la ERGE puede coexistir con la tos crónica, así como ser el resultado de la tos. Los estudios demostraron que los eventos de reflujo después de la tos son comunes, tal vez relacionados con el aumento de la presión intraabdominal y la relajación del EEI, que a su vez pueden perpetuar un ciclo de la tos por reflujo.


La opinión de los expertos dicta en gran parte las directrices actuales para el tratamiento de la tos asociada a la ERGE. El ACCP recomienda enfocarse en la ERGE después del STVAS y el asma, incluso en pacientes sin pirosis, regurgitación, o sabor agrio. En lugar de realizar pruebas, se recomienda el tratamiento empírico, a partir de los cambios de estilo de vida (por ejemplo, pérdida de peso, dejar de fumar y limitar el consumo de alimentos grasos y ácidos, alcohol, chocolate, café y té) y la terapia con IBP durante al menos 8 semanas. También se pueden añadir agentes procinéticos si hay poca respuesta al tratamiento inicial. Los autores están de acuerdo con el enfoque empírico de la ACCP, principalmente porque las pruebas disponibles, tales como el monitoreo del pH de 24 horas no alterarían de manera necesaria la decisión de recomendar un curso de terapia antirreflujo, de los cuales hay relativamente pocas opciones. Dada la baja probabilidad de una respuesta significativa a los IBP, los autores no hacen esperar 8 semanas para obtener una respuesta, sino más bien al mismo tiempo persiguen la investigación de otras causas. En este punto, también hay un umbral bajo para remitir al paciente a un especialista. La institución de los autores rara vez ofrece la cirugía antirreflujo como funduplicatura para los pacientes con el único síntoma de tos crónica, y ciertamente sólo después de un tiempo suficientemente largo de ensayo terapéutico y una investigación a fondo que incluye el monitoreo de 24 horas del pH, esofagograma de bario y endoscopia.


CAUSAS MENOS COMUNES DE TOS CRÓNICA


La tos crónica en adultos que no fuman ni usan IECAs y tienen radiografía de tórax normal, es más probable el resultado de STVAS, asma, o ERGE. Sin embargo, en aquellos para los que el diagnóstico es aún incierto, hay varias causas menos comunes importantes a considerar. Una discusión completa está más allá del alcance de esta revisión, pero 2 condiciones importantes pero menos reconocidos se abordan aquí. La bronquitis eosinofílica no asmática (BENA) es una causa común de tos crónica que en algunas series puede ser más común que la tos relacionada a ERGE, en especial en ciertas regiones, como China y Japón. De manera similar al asma, se caracteriza por inflamación eosinofílica de las vías respiratorias, pero, sobre todo, no está presente la hiperreactividad reversible de las vías respiratorias. En consecuencia, el tratamiento primario son ICSs pero no agentes β-agonistas. Además de una radiografía de tórax normal y pruebas de función pulmonar, la presencia de eosinófilos en el análisis de células del esputo inducido es diagnóstico de acuerdo con las directrices de los expertos. Por desgracia, las oficinas de atención primaria e incluso muchas clínicas pulmonares no están equipadas de manera adecuada para obtener una muestra de esputo inducido. El enfoque de los autores es abordar la BENA junto con el asma, ya que las 2 condiciones se solapan en el diagnóstico y la terapéutica. A los pacientes se les ofrece un ensayo de corticoesteroides inhalados durante al menos 4 semanas, incluso si los exámenes de función pulmonar son normales, y el asma y la BENA se consideran como causas poco probables si no hay una mejoría en la tos. De manera similar a STVAS y el asma, a los pacientes se les pregunta sobre los posibles factores agravantes ambientales u ocupacionales, en especial aquellos que pueden evitarse de manera fácil. La tosferina se reconoce cada vez más como causa de una tos postinfecciosa prolongada. El agente etiológico es la bacteria Bordetella pertussis, que es altamente contagiosa. Aunque puede causar enfermedad grave e incluso la muerte en los lactantes y los niños pequeños no vacunados, los adultos rara vez presentan los síntomas clásicos como el silbido respiratorio característico entre la tos y la tos emetizante. En lugar de ello, los adultos infectados pueden manifestar síntomas leves, como síntomas no específicos de infección de las vías aéreas superiores y tos prolongada. Dado lo difícil que es evaluar de manera clínica la probabilidad de tener tosferina como la causa de tos crónica en los adultos, es tentador ordenar pruebas de laboratorio, tratar de forma empírica con antibióticos, o ambos. Los hisopos nasofaríngeos para cultivo y la reacción en cadena de la polimerasa son diagnósticos, pero la ventana de la utilidad es sólo durante las primeras 4 semanas de la enfermedad. Por el contrario, las pruebas serológicas se pueden hacer en las etapas posteriores (4-12 semanas) y pueden confirmar el diagnóstico si hay un aumento de 4 veces en los niveles de anticuerpos de inmunoglobulina G; esto podría, sin embargo, requerir la previsión de obtener una muestra temprana de suero durante la fase aguda. Los antibióticos son eficaces en la erradicación de B. pertussis y la reducción de la transmisión durante las primeras semanas de la enfermedad. Sin embargo, según una revisión sistemática de Cochrane, el tratamiento no alteró de manera significativa el curso de la enfermedad, incluso la tos.


SÍNDROME DE TOS POR HIPERSENSIBILIDAD


Hay una creciente evidencia de que el cuerpo puede modular de forma natural la sensibilidad de los sensores del reflejo de la tos. Este hecho se observa de forma común después de una infección de vías aéreas superiores aguda cuando una persona puede experimentar un paroxismo de tos en respuesta a factores desencadenantes relativamente menores como el aire frío, los aerosoles inhalados, la risa y realizar una respiración profunda. Esta sensibilidad aumentada a la tos por lo general vuelve a la línea de base después de 2 a 3 semanas. Para algunas personas, sin embargo, este estado de hipersensibilidad persiste por mucho tiempo después de que el estímulo original se fue. Los investigadores no están seguros de qué factores conducen a la hipersensibilidad del reflejo de la tos, y algunos plantearon la hipótesis de que puede ser una característica fundamental de todos los casos de tos crónica, independientemente de las condiciones agravantes como ERGE, asma o uso de IECAs. Por otra parte, no es seguro que estas condiciones causan hipersensibilidad del reflejo tusígeno o sirven como un disparador para una persona ya sensibilizada.


Mientras que el concepto del síndrome de tos por hipersensibilidad continúa en evolución se reconocen cada vez más implicaciones clínicas, sobre todo para los pacientes que, después de una extensa evaluación y el cumplimiento estricto de las terapias empíricas, se quedan con la etiqueta de “tos crónica inexplicada”. Nuevos enfoques de tratamiento, que intentan restablecer la sensibilidad del reflejo de la tos (central y periférico), están bajo investigación. Por ejemplo, la gabapentina, un neuromodulador central utilizado en una variedad de condiciones como analgésico para el dolor neuropático, se estudian en la actualidad y, de manera eventual, podrían tener un papel en el tratamiento de la tos crónica. Algunos canales de receptores potenciales transitorios periféricos son también objetivos potenciales para nuevos agentes antitusivos.


RESUMEN


La tos crónica es un problema frustrante y común, que da lugar a secuelas psicológicas y físicas significativas, así como enormes costos financieros en términos de gastos por la atención médica y el tiempo de trabajo perdido. La disminución de la calidad de vida y la depresión son comunes. Sin embargo, el uso de un enfoque sistemático, que incluye la evaluación de si el paciente utiliza IECAs o si fuma, la exclusión de la presencia de señales de alerta y los factores de riesgo para enfermedades que atenten contra la vida y tener una radiografía de tórax normal, permiten diagnosticar más de 90% de los casos de tos crónica como causados por STVAS, asma, o ERGE. Se recomienda para abordar estas condiciones de forma secuencial comenzar con STVAS. La bronquitis eosinofílica no asmática y la infección por B. Pertussis con frecuencia no se reconocen por los proveedores de atención primaria y se deben considerar después abordar el STVAS, el asma y la ERGE. Por último, el síndrome de tos por hipersensibilidad es una nueva área de investigación y se plantea la hipótesis de que es el factor que subyace en muchos casos de tos crónica, independientemente del factor de incitación. Se necesita más investigación clínica para aclarar aún más la vía del reflejo de la tos y los factores que intervienen en la modulación de la sensibilidad, lo que de forma eventual puede conducir a nuevas terapias antitusígenas.



Genji Terasaki , Douglas S. Paauw 


Evaluation and Treatment of Chronic Cough. Medical Clinics of North America Volume 98, Issue 3, May 2014, Pages 391–403




Centro Regional de Alergia e Inmunología Clínica CRAIC, Hospital Universitario “Dr. José Eleuterio González” UANL, Monterrey, México



Dra. med. Sandra N. González Díaz        Jefe y Profesor


Dr. José Antonio Buenfil López                 Profesor


Dra. Dulce María Rivero Arias                   Residente 1er Año


Dra. Alejandra Macías Weinmann            Profesor



 

domingo, 27 de julio de 2014

Las personas alérgicas al látex pueden desarrollar también sensibilidada determinadas frutas, muchas de ellas tropicales

El verano es la época en la que se consumen más frutas tropicales y es también cuando muchas personas descubren que son alérgicas a este tipo de alimentos. Generalmente son personas que ya eran alérgicas al látex. Esto es debido a que determinadas frutas -muchas de ellas tropicales- tienen un alérgeno en común con ese material. Así, los que tienen sensibilidad hacia el látex pueden desarrollarla también hacia determinadas frutas, pero solo cuando se consumen frescas y no han sufrido tratamiento industrial por calor o cocinado casero. Es lo que los expertos denominan Síndrome látex-fruta

Journal Club: Suplementación prenatal de vitamina D para prevenir el asma infantil: resultados de 15 años del Ensayo de Reducción del Asma Antenatal de la Vitamina D (VDAART)

Las consideraciones iniciales sobre por qué la deficiencia de vitamina D podría ser crítica para los orígenes del asma comienzan con el cono...