La alergia alimentaria es una reacción adversa del sistema inmune ante la ingesta de algún alimento que el cuerpo rechaza. Esta respuesta es normal cuando se da frente a una bacteria o un virus, pero en este caso se produce ante ciertos alimentos, y con más frecuencia ante los proteínicos.
El doctor Arturo Borzutzky, profesor asistente de la Facultad de Medicina UC y pediatra de Red de Salud UC CHRISTUS, con posgrado en Inmunología, Alergia y Reumatología Pediátrica en Estados Unidos, realizó –junto con otros profesionales– un estudio de prevalencia de alergias alimentarias en la población escolar chilena para analizar la situación en el país.
“Estudiamos a más de 400 niños de diferentes colegios de la Región Metropolitana, de kínder, quinto básico y primero medio, que representaban las edades de 5, 10 y 15 años. Hicimos un cuestionario de dos fases: una para ver si había algún indicio de alergia y otra, más detallada, en la que hablamos con los padres y conseguimos datos sobre qué alimentos enfermaban a sus hijos, cuánto duraba la reacción alérgica y cuáles fueron los tratamientos recetados”, explica.
Los resultados arrojaron que un 5,5% de los escolares chilenos presentan esta enfermedad, con distintos tipos de reacciones adversas, entre ellas, molestias digestivas, respiratorias, dermatológicas o multisistémicas. En nuestro país, los alimentos más reportados como causantes de alergia son las nueces, el maní, el huevo, los chocolates, el plátano y los mariscos. Sin embargo, se puede desarrollar alergia a cualquier alimento.
¿Por qué se producen?
Esta patología es muy frecuente en la población infantil y adulta. Según el doctor Borzutzky, sus causas incluyen un componente genético y otro ambiental. “Las alergias alimentarias de hipersensibilidad inmediata corresponden a las reacciones alérgicas agudas frente a la ingesta de algún alimento. Puede haber ronchas, hinchazón, ahogo y sufrir un shock anafiláctico o anafilaxia, que es una respuesta alérgica grave que puede incluso amenazar la vida de una persona”.
Los síntomas pueden aparecer rápidamente, manifestándose a los pocos minutos o incluso durante la ingesta del alérgeno, o de forma tardía, revelándose a los pocos días o semanas de haber consumido el alimento que provoca la alergia. Cuando la sintomatología corresponde a una alergia alimentaria, no se logra detener con ningún medicamento. Solamente es posible suprimir la respuesta del sistema inmune al eliminar el alérgeno que afecta al paciente.
Cómo tratar este mal
El doctor Borzutzky afirma que el manejo de las alergias alimentarias es dietético. “Se deben excluir de la dieta, por un tiempo prolongado, los alimentos que causan estas reacciones para así evitar que el paciente vuelva a tenerlas. También hay que prescindir del consumo de productos que puedan provocar alergias cruzadas. Si se desata el cuadro alérgico, el tratamiento es con adrenalina en casos severos y antialérgicos en los más leves”. El especialista agrega que en el mundo ya se están realizando protocolos de investigación para curar alergias alimentarias con inmunoterapia, con el objetivo de que en el futuro se puedan eliminar las alergias de este tipo.
¿Qué hago si mi hijo es alérgico alimentario? 
Lo primero comenta el doctor es consultar con un especialista para tener un diagnóstico claro y contar con un plan de acción ante una reacción alérgica.
En segundo lugar es importante ser estricto con la dieta. Esto q,uniere decir que se deben evitar los derivados –productos que se elaboran con el alimento que ocasiona las alergias– y en algunos casos las trazas, que son las mínimas partículas que puede contener la comida, ya sea por algún derivado o por contaminación en la línea de producción.
Además los padres deben estar atentos de leer los rótulos de los alimentos cada vez que se compran para asegurarse de que no contengan el alimento al que el niño es alérgico. También es aconsejable almacenar por separado los alimentos del niño en tratamiento. En el refrigerador, se sugiere usar los compartimentos más altos para protegerlos mejor.
Finalmente, si el niño está en riesgo de tener anafilaxia, debe portar un autoinyector de adrenalina.
¿Cómo se si mi hijo posee una alergia alimentaria?
Los síntomas inmediatos explica el doctor Borzutzkyson la aparición de ronchas, dificultad respiratoria, ataque de tos y silbido de pecho, vómitos explosivos, dolor abdominal, diarrea de inicio brusco y anafilaxia.
De la misma manera hay que estar atentos a los síntomas tardíos que se caracterizan por diarrea crónica, deposiciones con sangre y mucosidad, vómitos recurrentes, bajo peso, estancamiento del crecimiento, llanto persistente y dermatitis atópica severa