Expertos e investigadores explican las 'conquistas' y carencias en el estudio de esta afección pulmonar
La investigación sanitaria en el asma es detonante de multitud de retos pero, al mismo tiempo, motivo de oportunidades. En un paradigma tan complejo como cambiante que afecta a esta y otras patologías pulmonares, cabe plantearse el punto en el que se encuentra su tratamiento en el Sistema Nacional de Salud (SNS) y los desafíos y logros concretos que la han conducido hasta el mismo. La XXXII Reunión de Invierno de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ) ha dado el momento y el lugar idóneos para analizar todas estas cuestiones desde todas las aristas que incumben el estudio de dicha enfermedad.
El vicepresidente de Separ, Carlos Almonacid, ha querido profundizar en el papel que los entornos digitales tienen en la asistencia, docencia, gestión e investigación sanitaria de esta afección neumológica y en las virtudes y carencias de su uso y desarrollo actual. En lo que al ámbito educativo se refiere, este especialista destaca el trabajo realizado por la propia sociedad científica tras la pandemia del coronavirus en pro de “desarrollar manuales de teleasistencia, implementarlos y mejorarlos” con el propósito aún presente de “seguir trabajando” en esta línea.
Aun así, existen ‘peros’. Y es que para la segunda ‘voz cantante’ de Separ, las aplicaciones desarrolladas para el seguimiento de los pacientes con asma con las que cuenta dicha sociedad científica “están dando fallos y quedando desfasadas”, por lo que considera necesario redirigir los esfuerzos hacia esta dirección y actualizar y mejorar sus prestaciones. Es por ello que para Almonacid, “la telemonitorización es la tarea pendiente” en el abordaje de los pacientes con asma. Un correcto uso de las TIC aporta beneficios en cuestiones como el control, la autogestión o la calidad de vida del paciente no sólo en asma, sino también en otras afecciones respiratorias como la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC).
En palabras de Marina Blanco, secretaria de Separ y responsable de la Unidad de Asma del Hospital Universitario de A Coruña, la solución es contar con registros de pacientes basados en “una metodología adecuada” con el fin de que “los resultados derivados sean fidedignos”. En caso de conseguir llevar esta premisa a la práctica, el siguiente paso en opinión de la especialista es que “las sociedades científicas deben velar para evitar sesgos”. Para ello, Blanco va ‘un paso más allá’ y hace un llamamiento a las administraciones para que establezcan “una normativa sobre registros”.
Como punto de partida para comprender los avances cosechados hasta ahora en asma, David Ramos, miembro de Separ, del Departamento de Neumología del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau y del Instituto de Investigación Biomédica (IIB) Sant Pau, ha expuesto el procedimiento de investigación frente a dicha patología con modelos in vivo de animales, que define como “un eje en torno al que gira todo lo demás”. Considera que su uso hoy en día “es irremplazable”, puesto que “sin ellos no podríamos aprender mecanismos de la enfermedad”.
Los procedimientos de sensibilización de estos sujetos “puede variar muchísimo”, pero siempre persiguen el mismo objetivo: medir la capacidad pulmonar en roedores a la par que se suministran dosis cada vez mayores de alérgenos. Para ello, se utilizan mecanismos de ventilación mecánica y procesos de provocación inespecífica, de los cuales se obtienen variables con interpretación fisiológica como la insuficiencia pulmonar. Ramos ha aclarado que, una vez terminado este proceso, “estos animales no son recuperables por cuestiones éticas” y se les somete, por tanto, a un proceso de eutanasia.
Otro punto clave para un abordaje eficaz del asma es la multidisciplinariedad, que debe estar manifiesta desde la investigación. Así lo ha destacado Sandra Dorado, coordinadora Área Rehabilitación Pulmonar de Separ y neumóloga en la Unidad de Asma del hospital de Galdakao. “Teniendo en cuenta todas las áreas de Separ, tenemos muchas oportunidades de colaborar”, explica, añadiendo que en el abordaje del asma la Neumología puede unir fuerzas con otras especialidades médicas así como con profesiones sanitarias como la Enfermería o la Fisioterapia.
Es por ello que la colaboración entre diferentes disciplinas es la tónica dominante en el desarrollo de los Programas Integrados de Investigación (PII) de Separ, así como en las becas emitidas por dicha entidad. “Es beneficioso para todos, vamos a conseguir un tamaño muestral mayor y reclutar a pacientes en menor tiempo”, sostiene Dorado. El objetivo para ella no es otro que “hacer Medicina Traslacional” basada en “diferentes perspectivas” que puedan beneficiar al propio enfermo.
Por su parte, Iñigo Ojanguren, coordinador del Grupo Emergente de Asma (GEA) de Separ y neumólogo en el Hospital Vall d’ Hebron, ha querido analizar cuál es el punto de partida para aquellos profesionales del SNS que quieran dedicarse a la investigación sanitaria. A su parecer, esta ámbito tiene un “papel anecdótico” durante la Formación Sanitaria Especializada (FSE), por lo que una vez transcurrida dicha etapa, quienes quieran desarrollar una labor investigadora tienen “muchas preguntas”. El paradigma que encuentran posteriormente no es fácil, ya que ‘aglomera’ cuestiones como la presión, la falta de tiempo o la dificultad de acceso a tutores y redes de investigación para los más jóvenes, así como la financiación del propio sector.
Pero incluso con todos estos puntos en contra, Ojanguren ve en el propio GEA una “herramienta facilitadora” de la labor investigadora a la que acompañan otras iniciativas de Separ como las becas o los programas de estancia a nivel local. Todas estas prestaciones permiten, en su opinión, “conocer a personas con intereses similares y hacer una red de contactos profesionales”, dos cuestiones que allanarán el camino durante los primeros pasos en dicho gremio.
El vicepresidente de Separ, Carlos Almonacid, ha querido profundizar en el papel que los entornos digitales tienen en la asistencia, docencia, gestión e investigación sanitaria de esta afección neumológica y en las virtudes y carencias de su uso y desarrollo actual. En lo que al ámbito educativo se refiere, este especialista destaca el trabajo realizado por la propia sociedad científica tras la pandemia del coronavirus en pro de “desarrollar manuales de teleasistencia, implementarlos y mejorarlos” con el propósito aún presente de “seguir trabajando” en esta línea.
 Carlos Almonacid, vicepresidente de Separ. |
Pero también es oportuno instruir a los propios pacientes, y las Tecnologías de la Información y la Comunicación (TICs) tienen un papel más que reseñable en dicha tarea. Almonacid ha aprovechado la ocasión para señalar la progresión experimentada en este sentido desde el año 2020, puesto que en ese momento “menos del 20 por ciento de los hospitales del SNS podían hacer teleasistencia 'en condiciones'”. Las tornas han dado un giro de casi 360 grados puesto que, ahora mismo, “el paciente puede ver su historial y sus análisis y tiene la vídeoconsulta a su alcance en prácticamente todo el sistema sanitario”.
"El paciente puede ver su historial y sus análisis y tiene la videoconsulta a su alcance en prácticamente todo el sistema sanitario" |
Aun así, existen ‘peros’. Y es que para la segunda ‘voz cantante’ de Separ, las aplicaciones desarrolladas para el seguimiento de los pacientes con asma con las que cuenta dicha sociedad científica “están dando fallos y quedando desfasadas”, por lo que considera necesario redirigir los esfuerzos hacia esta dirección y actualizar y mejorar sus prestaciones. Es por ello que para Almonacid, “la telemonitorización es la tarea pendiente” en el abordaje de los pacientes con asma. Un correcto uso de las TIC aporta beneficios en cuestiones como el control, la autogestión o la calidad de vida del paciente no sólo en asma, sino también en otras afecciones respiratorias como la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC).
En palabras de Marina Blanco, secretaria de Separ y responsable de la Unidad de Asma del Hospital Universitario de A Coruña, la solución es contar con registros de pacientes basados en “una metodología adecuada” con el fin de que “los resultados derivados sean fidedignos”. En caso de conseguir llevar esta premisa a la práctica, el siguiente paso en opinión de la especialista es que “las sociedades científicas deben velar para evitar sesgos”. Para ello, Blanco va ‘un paso más allá’ y hace un llamamiento a las administraciones para que establezcan “una normativa sobre registros”.
 Marina Blanco, secretaria de Separ y responsable de la Unidad de Asma del Hospital Universitario de A Coruña. |
Modelos in vivo en la investigación del asma
Como punto de partida para comprender los avances cosechados hasta ahora en asma, David Ramos, miembro de Separ, del Departamento de Neumología del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau y del Instituto de Investigación Biomédica (IIB) Sant Pau, ha expuesto el procedimiento de investigación frente a dicha patología con modelos in vivo de animales, que define como “un eje en torno al que gira todo lo demás”. Considera que su uso hoy en día “es irremplazable”, puesto que “sin ellos no podríamos aprender mecanismos de la enfermedad”.
Los procedimientos de sensibilización de estos sujetos “puede variar muchísimo”, pero siempre persiguen el mismo objetivo: medir la capacidad pulmonar en roedores a la par que se suministran dosis cada vez mayores de alérgenos. Para ello, se utilizan mecanismos de ventilación mecánica y procesos de provocación inespecífica, de los cuales se obtienen variables con interpretación fisiológica como la insuficiencia pulmonar. Ramos ha aclarado que, una vez terminado este proceso, “estos animales no son recuperables por cuestiones éticas” y se les somete, por tanto, a un proceso de eutanasia.
 David Ramos, miembro de Separ, del Departamento de Neumología del Hospital de la Santa Creu i Sant Pau y del Instituto de Investigación Biomédica (IIB) Sant Pau. |
Abordaje multidisciplinar del asma
Otro punto clave para un abordaje eficaz del asma es la multidisciplinariedad, que debe estar manifiesta desde la investigación. Así lo ha destacado Sandra Dorado, coordinadora Área Rehabilitación Pulmonar de Separ y neumóloga en la Unidad de Asma del hospital de Galdakao. “Teniendo en cuenta todas las áreas de Separ, tenemos muchas oportunidades de colaborar”, explica, añadiendo que en el abordaje del asma la Neumología puede unir fuerzas con otras especialidades médicas así como con profesiones sanitarias como la Enfermería o la Fisioterapia.
Es por ello que la colaboración entre diferentes disciplinas es la tónica dominante en el desarrollo de los Programas Integrados de Investigación (PII) de Separ, así como en las becas emitidas por dicha entidad. “Es beneficioso para todos, vamos a conseguir un tamaño muestral mayor y reclutar a pacientes en menor tiempo”, sostiene Dorado. El objetivo para ella no es otro que “hacer Medicina Traslacional” basada en “diferentes perspectivas” que puedan beneficiar al propio enfermo.
 Sandra Dorado, coordinadora Área Rehabilitación Pulmonar de Separ y neumóloga en la Unidad de Asma del hospital de Galdakao. |
Formación para investigadores en asma
Por su parte, Iñigo Ojanguren, coordinador del Grupo Emergente de Asma (GEA) de Separ y neumólogo en el Hospital Vall d’ Hebron, ha querido analizar cuál es el punto de partida para aquellos profesionales del SNS que quieran dedicarse a la investigación sanitaria. A su parecer, esta ámbito tiene un “papel anecdótico” durante la Formación Sanitaria Especializada (FSE), por lo que una vez transcurrida dicha etapa, quienes quieran desarrollar una labor investigadora tienen “muchas preguntas”. El paradigma que encuentran posteriormente no es fácil, ya que ‘aglomera’ cuestiones como la presión, la falta de tiempo o la dificultad de acceso a tutores y redes de investigación para los más jóvenes, así como la financiación del propio sector.
"La investigación tiene un 'papel anecdótico' en la Formación Sanitaria Especializada" |
Pero incluso con todos estos puntos en contra, Ojanguren ve en el propio GEA una “herramienta facilitadora” de la labor investigadora a la que acompañan otras iniciativas de Separ como las becas o los programas de estancia a nivel local. Todas estas prestaciones permiten, en su opinión, “conocer a personas con intereses similares y hacer una red de contactos profesionales”, dos cuestiones que allanarán el camino durante los primeros pasos en dicho gremio.
 Iñigo Ojanguren, coordinador del Grupo Emergente de Asma (GEA) de Separ y neumólogo en el Hospital Vall d’ Hebron. |
 Instantes de la conferencia 'El futuro de la investigación en asma'. |
Fuente: https://www.redaccionmedica.com/
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