El alergólogo Pedro Piraíno expresó que normalmente se puede ser alérgico al epitelio (especie de caspa) del perro como al del gato, "mucha gente piensa que si su mascota está siempre limpia ya es suficiente, pero eso no tiene nada que ver, porque el alergeno está en la saliva y en los casos de niños o adultos que estén sensibilizados al gato o al perro pueden tener alergia y lesiones graves", destacó.
El especialista expresó que además de la higiene del animal, en lo que se debe uno enfocar es en la limpieza del lugar donde estuvo el animal, "generalmente el gato o el perro se lame y al estar el alérgeno en la saliva, eso se queda en el pelo", refirió.
RECOMENDACIONES. Como estas mascotas son parte de la familia y resultaría doloroso, sobre todo para los pequeños que sean alérgicos, despegarse de sus animalitos, Piraíno sostiene que existe la opción de la inmunoterapia, que son las vacunas utilizadas por los alergólogos denominada inmunoterapia específica para epitelios. Resaltó que para los asegurados del IPS, allí se cuenta con dicha vacuna.
En cuanto a las personas que duermen con sus mascotas refirió que si no se está sensibilizado con el animal y este está libre de garrapatas u otras infecciones, no habría inconveniente en compartir la cama.
SÍNTOMAS. Según el doctor, en los pacientes alérgicos a ácaros o a epitelio, los síntomas son los mismos; estornudos, congestión nasal, rinorrea, entre otros. "Con los pacientes asmáticos es con quienes más cuidados debemos tener", afirmó.
Refirió que haciendo un cálculo estimativo, cerca del 10% de sus pacientes alérgicos con rinitis están sensibilizados al epitelio.
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