Estudios epidemiológicos han descrito que la obesidad incrementa la incidencia de asma
La obesidad y el asma son dos graves problemas de salud pública que cada vez son más frecuentes a nivel internacional. La Organización Mundial de la Salud (OMS) incluye estas patologías dentro de las principales enfermedades crónicas.
De acuerdo con Luis Torre Bouscoulet, especialista en Fisiología Respiratoria, una persona con obesidad tiene en su sangre diversos marcadores que traducen la existencia del proceso inflamatorio activo. Estudios epidemiológicos han descrito que la obesidad incrementa la incidencia de asma.