Entre un 5 y un 10 por ciento de asmáticos sufre su forma grave, que se caracteriza por su baja respuesta terapéutica y su gran heterogeneidad. Para cubrir esta laguna existe una importante investigación en marcha con anticuerpos monoclonales dirigidos a diferentes dianas. La semana pasada, AstraZeneca anunciaba resultados positivos de su anticuerpo monoclonal humanizado benralizumab, que actúa sobre la unidad alfa de los receptores de la interleucina-5 (anti IL-5) en asma eosinofílica no controlada.
Los resultados del ensayo clínico en fase IIb, publicados en The Lancet Respiratory Medicine, muestran que el fármaco, a dosis de 20 y 100 mg, logró una reducción de las exacerbaciones de entre el 40 y el 70 por ciento en pacientes con una concentración sanguínea basal de eosinófilos a partir de 300 U/l. La eficacia crecía cuanto más elevado aparecía este parámetro y mayor era la dosis del fármaco. Los efectos adversos más frecuentes asociados fueron el resfriado común y las reacciones en el lugar de la inyección.
CASI EL 70 % DEL ASMA GRAVE
El 68 por ciento de los asmáticos graves presentarían eosinofilia y serían candidatos al tratamiento, explica el jefe de la Unidad de Neumología Experimental del Hospital San Pablo, de Barcelona, David Ramos, que es uno de los investigadores españoles implicados en su desarrollo clínico. "Aunque son ensayos ciegos, era bastante obvio quién estaba recibiendo el tratamiento y no el placebo, porque la mejoría no era sólo subjetiva sino en parámetros como la función pulmonar y la disminución de las exacerbaciones".
Los resultados del ensayo clínico en fase IIb, publicados en The Lancet Respiratory Medicine, muestran que el fármaco, a dosis de 20 y 100 mg, logró una reducción de las exacerbaciones de entre el 40 y el 70 por ciento en pacientes con una concentración sanguínea basal de eosinófilos a partir de 300 U/l. La eficacia crecía cuanto más elevado aparecía este parámetro y mayor era la dosis del fármaco. Los efectos adversos más frecuentes asociados fueron el resfriado común y las reacciones en el lugar de la inyección.
CASI EL 70 % DEL ASMA GRAVE
El 68 por ciento de los asmáticos graves presentarían eosinofilia y serían candidatos al tratamiento, explica el jefe de la Unidad de Neumología Experimental del Hospital San Pablo, de Barcelona, David Ramos, que es uno de los investigadores españoles implicados en su desarrollo clínico. "Aunque son ensayos ciegos, era bastante obvio quién estaba recibiendo el tratamiento y no el placebo, porque la mejoría no era sólo subjetiva sino en parámetros como la función pulmonar y la disminución de las exacerbaciones".
"Son resultados muy positivos, que muestran cómo los anticuerpos monoclonales permitirán tratar a pacientes de difícil control", interpreta el también investigador de benralizumab Borja García-Cosío, coordinador del Área de EPOC del Ciber de Enfermedades Respiratorias (Ciberes).
El primer y único anticuerpo monoclonal comercializado frente a esta enfermedad es omalizumab (Xolair, de Novartis), para asma alérgica grave, que bloquea la acción de la inmunoglobulina IgE. Gabriel Gastaminza, del Departamento de Alergología e Inmunología de la Clínica Universidad de Navarra, explica que la indicación de benralizumab no sería la misma, ya que "hay un porcentaje importante de pacientes con asma eosinofílica en la que no se detecta la presencia de alérgenos". Eva Martínez Moragón, coordinadora del Área de Asma de la Sociedad Española de Neumología y Cirugía Torácica (Separ), va un paso más allá y expone que los datos apuntan a su indicación en asma grave con el fenotipo eosinofílico no alérgico, "en el que el eosinófilo juega un papel fundamental en la patogenia".
La administración sería subcutánea, entre mensual y bimestral. En el ensayo se emplearon los resultados del análisis de la sangre para guiar el tratamiento, aunque Ramos entiende que serían sólo "relativamente" predictivos, y que sería más adecuado "un muestreo más directo de las vías respiratorias".
Precisamente, la técnica empleada para identificar a los candidatos es una de las limitaciones que encuentra Gastaminza, hasta el punto de que impidió una correcta clasificación de los pacientes. Otra sería que el grupo placebo presentó un número de reagudizaciones menor del esperado, "lo que resta potencia estadística a los resultados".
Hace un mes la misma revista publicaba resultados negativos de benralizumab en EPOC, aunque los autores sugerían que el análisis por subgrupos apuntaba a que podría tener un papel en pacientes con eosinofilia, que deberá aclarar futuros trabajos.
Benralizumab no es el único anticuerpo monoclonal al rescate del asmático grave. Otros candidatos prometedores entre los anti-IL 5 en desarrollo son reslizumab (de Teva) y mepolizumab (de GSK). Sobre el candidato de Roche, lebrikizumab, un anti-IL13, se publicaban en marzo resultados positivos.
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